Para mí una práctica ideal de la enseñanza, sería que la educación estuviese centrada en el alumno, que él fuese el protagonista de su aprendizaje, teniendo en cuenta sus virtudes y sus defectos a la hora de aprender, su velocidad y su ritmo. De esta manera, el alumno podría aprender todos los contenidos de forma consistente y eficaz, deteniéndose en los mas costosos para él y dedicando menos tiempo a aquellos que le resulten más fáciles.
Esto sería para mí una práctica ideal de la enseñanza, pero es cierto que éste es un trabajo difícil. En primer lugar, para que ésto se pueda desarrollar, no debería haber tantos alumnos en un mismo aula como estamos acostumbrados actualmente. Además seria doble trabajo para el profesor ya que debería plantear un programa para cada alumno, único e individualizado, lo que le costaría horas y horas llevar a cabo.
El alumno, es la pieza fundamental en este proceso ya que sin él esta profesión no tendría sentido. Cada alumno es único e irrepetible y por ello creo que la educación debe estar centrada en sus capacidades y sus necesidades.
Creo que la mejor manera para que un alumno aprenda, es explicando la materia a impartir en un vocabulario adecuado a su edad, poniendo tantos ejemplos como haga falta, inventándose juegos, haciéndoles esquemas, dibujos...En resumen, adaptar la información a sus capacidades para que consigan entenderla de la mejor manera posible.
Si fuese docente, tendría muy en cuenta el aprendizaje de mis alumnos en mi enseñanza ya que pienso que es la información la que se debe adaptar a ellos y no ellos a los contenidos. Un buen profesor debe hacer todo lo que esté en su mano para buscar técnicas, métodos y procedimientos para hacer que los estudiantes comprendan los conceptos de la mejor manera posible. Además, hay que estar motivando continuamente a los escolares, para que no abandonen la tarea y continúen haciéndola de la mejor manera que sepan, para que se superen día a día, rompan sus barreras y alcancen sus metas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario